La localidad de Chapinero es tal vez un sitio emblemático en Bogotá, de las 3.815 hectáreas que la componen 2.505 son rurales y 2247 y por Declaración de los Cerros Orientales Reserva Forestal Protectora por la Resolución 76 de 1977.
Arquitectónicamente las construcciones importantes como los son sus Iglesias de Chinquinquira, Nuestra Señora del Pilar , la Porciúncula y Catedrales como Nuestra Señora de Lourdes , definen su estilo característico de sus habitantes.
Pero sin lugar a duda, los Cerros Orientales han marcado la vida de nuestra ciudad en ellos 12 fuentes hídricas cuyos nacimientos se encuentran en la alta montaña han alimentado el ecosistema del gran humedal que era la ciudad.
Estos nacimientos entre ellas “la Quebrada las Delicias “, adquieren gran importancia en el desarrollo vial de Bogotá siendo intervenida por el Instituto de Desarrollo Urbano con el interconector vial de la calle 63 con avenida circunvalar en 1999. De igual forma, en el año 2011 y buscando proteger y recuperar el caudal de la quebrada las delicias y evitar la erosión del suelo se realizo el convenio de asociación No 048-11 entre la Secretaria de Ambiente y Conservación Internacional para realizar el recuperación integral de la Quebrada.
Sin embargo, debemos destacar que en los altos de la montaña, se gesto desde 1920 una comunidad de familias trabajadores para el señor Julio Calderón Tejada y su esposa la señora Elvira, sus herederos al no cancelar las prestaciones sociales entregaron los predios y han sido tenedores de buena fe con sus respectivos títulos.
Parte del trabajo que realizaba paralelo a la explotación de las canteras era el cuidar la quebrada en la siembra de árboles.
Son un promedio de 30 troncos de familias que permanecen en el Bosque Calderón Tejada y de quienes estamos recopilando sus historias de vida, tradiciones, mitos y leyendas.
Arquitectónicamente las construcciones importantes como los son sus Iglesias de Chinquinquira, Nuestra Señora del Pilar , la Porciúncula y Catedrales como Nuestra Señora de Lourdes , definen su estilo característico de sus habitantes.
Pero sin lugar a duda, los Cerros Orientales han marcado la vida de nuestra ciudad en ellos 12 fuentes hídricas cuyos nacimientos se encuentran en la alta montaña han alimentado el ecosistema del gran humedal que era la ciudad.
Estos nacimientos entre ellas “la Quebrada las Delicias “, adquieren gran importancia en el desarrollo vial de Bogotá siendo intervenida por el Instituto de Desarrollo Urbano con el interconector vial de la calle 63 con avenida circunvalar en 1999. De igual forma, en el año 2011 y buscando proteger y recuperar el caudal de la quebrada las delicias y evitar la erosión del suelo se realizo el convenio de asociación No 048-11 entre la Secretaria de Ambiente y Conservación Internacional para realizar el recuperación integral de la Quebrada.
Sin embargo, debemos destacar que en los altos de la montaña, se gesto desde 1920 una comunidad de familias trabajadores para el señor Julio Calderón Tejada y su esposa la señora Elvira, sus herederos al no cancelar las prestaciones sociales entregaron los predios y han sido tenedores de buena fe con sus respectivos títulos.
Parte del trabajo que realizaba paralelo a la explotación de las canteras era el cuidar la quebrada en la siembra de árboles.
Son un promedio de 30 troncos de familias que permanecen en el Bosque Calderón Tejada y de quienes estamos recopilando sus historias de vida, tradiciones, mitos y leyendas.